En los últimos tiempos, ha habido una gran controversia sobre la acentuación o no acentuación de la palabra "solo". Esto ha sido debido a la ambigua noticia de este 2023 que parecía asegurar que la RAE daba marcha atrás a su regla de 2010 en la que recomendaba no usar la tilde en “solo” y en los pronombres demostrativos “este, ese y aquel”. Sin embargo, nada más lejos de la realidad, pues poco después la RAE dejaba clara su postura: “Lo aprobado en el pleno del 2 de marzo de 2023 no modifica la doctrina de la “Ortografía” de 2010; se mantiene la obligatoriedad de no tildar el adverbio “solo” y los demostrativos cuando no exista riesgo de ambigüedad, una valoración – y he aquí la polémica- que queda “a juicio del que escribe”.
A pesar de esta aclaración, algunos siguen argumentando que siempre debe ser acentuada, mientras que otros insisten en que no debe ser acentuada bajo ninguna circunstancia. ¿Y qué creemos nosotros? Pues tenemos razones para mantener la no acentuación:
- Primero, es importante aclarar que la Real Academia Española (RAE) dicta que "solo" no debe ser acentuada en ningún caso. Según la RAE, "solo" es un adverbio que significa "solamente" o "únicamente", y no es una palabra polisémica. En este sentido, no hay riesgo de confusión con otras palabras que puedan tener una pronunciación similar.
- Además, la supuesta ambigüedad que algunos argumentan se resuelve fácilmente mediante el contexto. El uso de "solo" en una oración suele dejar claro su significado, y la acentuación no hace falta para diferenciarlo de otras palabras. Por ejemplo, en la frase "solo quiero verte", es evidente que "solo" significa "solamente", y no hay confusión posible.
- Por otro lado, la acentuación innecesaria de "solo" puede dar lugar a problemas de ortografía. Si se empieza a acentuar "solo" de manera generalizada, es probable que muchas personas comiencen a acentuarla incorrectamente en otros contextos en los que no debe ser acentuada, como en "solo de pensarlo me duele la cabeza", donde "solo" se refiere a "solamente".
En resumen, no hay argumentos fuertes a favor de la acentuación de "solo". La palabra no es polisémica, su significado se entiende claramente en el contexto y su acentuación innecesaria puede dar lugar a errores ortográficos. Por lo tanto, lo más adecuado es seguir la recomendación de la RAE y no acentuar "solo" en ningún caso.