Cuando se empieza a impartir clases de ELE, normalmente todos tenemos un poco de miedo de encontrarnos con grupos de niveles "extremos", bien porque pensamos que va a ser imposible que los alumnos nos entiendan, bien porque tememos no poseer los conocimientos suficientes en grupos avanzados. En ambos casos se requiere una preparación especial y diferente para que la enseñanza llegue a buen puerto, pero, con todo, ¿pensáis que es más fácil impartir clases a un nivel A1 o a un nivel C2?
En este entrada intentaremos dar respuesta a la eterna pregunta que tanto inquieta a los profesores de español como lengua extranjera evaluando las particularidades de cada nivel y las dificultades a las que se puede enfrentar un profesor a la hora de enseñar estos niveles en el aula de ELE.
Si consideramos la simplicidad de los contenidos, a primera vista puede parecer que la respuesta es evidente – es más fácil impartir clases de nivel A1. La variedad de temas tratados en clase es considerablemente menor respecto a un nivel C2 y los estudiantes están aprendiendo conceptos básicos como el alfabeto, vocabulario elemental y estructuras gramaticales simples. Además, las clases se centran en mejorar sus habilidades comunicativas elementales, como presentarse o pedir direcciones, y al tratarse de conceptos más simples y directos que en un nivel C2, nos puede dar la impresión de que son más fáciles de enseñar, pero ¿es esto realmente así?
Son muchas las dificultades a las que se debe enfrentar un profesor al encontrarse con grupos de nivel A1, algunas de estas son:
Si nos movemos al otro extremo y consideramos la dificultad de enseñar español en un nivel C2, donde los estudiantes tienen un dominio casi nativo del idioma y la amplitud de temas tratados es mucho mayor, podría parecer que este nivel es más desafiante de abordar en el aula. De hecho, hay varias razones para pensar así, ya que en un nivel C2 el profesor debe:
Sin embargo, algunas personas podrían llegar a considerar que enseñar el nivel C2 es más fácil. En primer lugar, los estudiantes suelen tener una mayor autonomía en su aprendizaje y pueden asumir un papel más activo en la clase, lo que a menudo se traduce en una mayor fluidez de la enseñanza pues se trata de estudiantes más motivados y comprometidos con su aprendizaje. Asimismo, su dominio del idioma es mayor y lo es también su capacidad de comprender y producir una amplia variedad de textos y discursos, facilitando así la comunicación en el aula. Además, se trata de un nivel en el que los estudiantes pueden acceder a una amplia gama de recursos y materiales auténticos en español, como periódicos, revistas, libros y películas, enriqueciendo su experiencia de aprendizaje y proporcionando una base sólida para la enseñanza.
Entonces, ¿cuál de los dos niveles resulta más fácil de enseñar: A1 o C2? En pocas palabras, determinar qué nivel es más fácil de enseñar entre un A1 y un C2 es complicado, ya que cada uno presenta desafíos únicos. La facilidad de enseñanza dependerá de la competencia y las preferencias individuales del profesor, así como su experiencia personal. Y a ti, ¿qué nivel te resulta más fácil de enseñar?