Cualquiera que haya visitado Valencia se habrá percatado de que hay una fruta que sin duda destaca por ser la preferida de los valencianos. Es redonda, cítrica y si te decimos su color como pista, te estaremos diciendo su nombre. No te lo podemos poner más fácil, seguro que sabes ya a cuál nos estamos refiriendo… ¡Exacto! Hablamos de la naranja. Pero, ¿por qué esta fruta es tan popular aquí? En el post de hoy descubriremos el porqué de esta típica fruta de Valencia.
El primer motivo de por qué se cultiva tanto esta fruta es porque en esta tierra se dan las condiciones idóneas para este tipo de cultivo. En Valencia, contamos con un clima mediterráneo que se caracteriza por temperaturas suaves desde los meses de octubre hasta aproximadamente junio. No sólo eso, los suelos son muy fértiles gracias a los nutrientes depositados en ellos por el transcurso de los ríos y, además, se cuenta con un sistema de regadío mediante acequias heredado de la cultura árabe.
Para conocer un poco de la historia de este fruto tenemos que remontarnos varios siglos atrás. Ya en el siglo XIII d.C había constancia de la llegada de naranjas a la península provenientes de los árabes, quienes comenzaron a cultivarlas aquí tras ver que, dado el clima, las semillas respondían mejor. Cabe destacar que, en un principio los naranjos no eran cultivados para el consumo, sino con meros fines decorativos. Destinado el naranjo a la decoración de patios, fue primero utilizado para la ornamentación de la Mezquita de Córdoba y también para la de Sevilla. Sería posteriormente cuando llegaría a los Patios de la Lonja de Valencia.
La naranja de entonces no es la que conocemos a día de hoy para el consumo, de hecho, se destinaba incluso a la limpieza como se hace con el limón. No sería hasta 5 siglos más tarde cuando debido a las excelentes condiciones climatológicas de Valencia que las cepas se irían transformando y surgiendo así variedades más dulces. A raíz de ello, ya sí, la población comenzó a introducir esta fruta en su alimentación.
La ruta de la seda tendría un papel exponencial en cuanto a la expansión de la naranja. A través de ella, quedaban conectados los 5 continentes mediante rutas marítimas. Gracias a ello la naranja valenciana experimentó una extensión global.
Desde luego, no nos extraña que sea la fruta preferida de los valencianos, si es que ¡está deliciosa! Si quieres conocer más sobre la gastronomía española, echa un vistazo a nuestro blog sobre gastronomía española en Navidad.
Tanto hablar de naranjas, seguro que te han entrado ganas una. Y dónde mejor que hacerlo que el lugar por excelencia, ¡Valencia! No esperes más para venir a disfrutar de esta magnífica ciudad mientras aprendes español y por supuesto, probar las naranjas de aquí.
En Costa de Valencia, escuela de español, ofrecemos cursos para todos los niveles y edades, ¡no dudes en preguntarnos por ellos!